El Intendente se refirió a la situación de tres trabajadores municipales sospechados de participar del robo a la familia Onetto en Pueblo Doyle: "Me parece rarísimo, pero hay que dejar actuar a la Justicia", sentenció
Un empleado de la Secretaría de Seguridad, otro que trabaja en la órbita de la Secretaría de Desarrollo Humano y un tercer municipal que se desempeña en la Delegación de Santa Lucía, fueron imputados por el Fiscal Marcelo Manso, sospechados de participar del robo en banda, a mano armada, del que fue víctima la familia Onetto.
Ante la consulta, el Intendente confirmó este viernes en La Radio 92.3, que habló con uno de los trabajadores sospechados a quien dijo conocer "desde hace mucho tiempo", y afirmó: "Sé que son buenas personas, pero uno nunca sabe".
"Esto ahora está en manos de la Justicia", dijo Salazar y cuestionó: "Queda como que el Intendente es culpable de cada una de las cosas que hacen los empleados". En ese sentido, sentenció: "Si son culpables, lo determinará la Justicia".
"Me sorprendió que puedan estar involucrados, los conozco hace mucho tiempo, me parece rarísimo, pero hay que dejar actuar a la Justicia", dijo respecto de los involucrados, y agregó: "Con uno de ellos hablé, me dijo que no tenía nada que ver, que estaba sorprendido, y que no sabía porqué".
La teoría que sostienen los imputados, de acuerdo a lo que le transmitieron al Intendente, es que "fueron a pescar, varios de ellos, hace unos días, y los relacionaron con los sospechosos por una foto", dijo el Jefe Comunal, y aclaró: "Nosotros no podemos despedir a nadie, bajo ningún punto de vista, ni iniciar sumario, hasta que la justicia determine si son culpables o inocentes".