Un sampedrino que evadió varios controles policiales fue detenido en Baradero. La persecución comenzó en Ruta 1001 y concluyó en inmediaciones del Cementerio Parque de esa ciudad. La causa recayó en la UFI 7. El operativo incluyó disparos a los neumáticos para lograr detenerlo. Cuando Policía Vial intentó detenerlo, habría estado a punto de atropellar a un efectivo. No estaba alcoholizado
Personal del Destacamento de Río Tala fue alertado por una camioneta que realizaba maniobras peligrosas en Ruta 1001. Al intentar detenerlo, se da a la fuga en sentido hacia Ruta 9.
De acuerdo al informe oficial, el conductor de 23 años siguió a alta velocidad, tomó Ruta 9 en sentido a Buenos Aires y tras varios kilómetros cruzó de carril, y comenzó a circular en sentido a Rosario. A la altura de Río Tala, de acuerdo a lo descripto por personal policial, cruzó el cantero central y evitó nuevamente el control policial montado para intentar detenerlo. Allí, habría estado a punto de atropellar a uno de los uniformados.
Nuevamente sobre el carril en sentido a Buenos Aires llegó hasta Baradero. Ingresó por Ruta 41 y finalmente lograron interceptarlo al internarse en un camino sin salida, en inmediaciones del Cementerio Parque de esa ciudad. En medio de la persecusión, efectivos policiales habrían efectuado disparos a los neumáticos para intentar detenerlo. El conductor, un sampedrino de 23 años, fue aprehendido, estuvo demorado algunas horas y posteriormente fue liberado.